Cuando pensó en que la mitad de la vida se le había ido recordando qué era lo que tenía que hacer, cuando de pronto quedó en blanco para no recordar nada más, o qué es lo que tiene..., siguió lamentandose; primero por seguir haciéndolo y porque aún podía recordar esa nimiedad. La verdad es que el único hecho concreto era que olvidaba todo,osea, ya había que dar el caso por perdido. Para qué su desfallecida memoria le seguía trayendo recuerdos de reproche y pucha, qué se yo. Fue en ese momento cuando también se dio cuenta de que lamentablemente había perdido la otra mitad del tiempo buscando algo que no tenía idea qué era y analizando instantáneamente la situación de su 'pobre memoria' para ver que entre todo el lío al final lo que la mantenía atada a una vaga esperanza de terminar sin saber nada era exactamente lo que le angustiaba y le hacía pensar que talves era mejor no recordar nada pero no...era mejor recordar que no recordaba, porque de este modo estoy segura de que alguna vez lo supe, y que en algún momento tendría que recordar donde dejé el maldito cable del teléfono de la conexión para el puerto usb, y auque en ese momento ya no importe o sea muy tarde, al final de todo lo habría recordado.
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